Es la víscera más voluminosa del organismo -pesa cerca de dos kilos- y el más versátil de todos los órganos. Se halla situada en la parte superior derecha de la cavidad abdominal, inmediatamente debajo de la cúpula del diafragma.
El hígado es esencial para la vida y la base del procesamiento de los alimentos usados por el cuerpo. Los carbohidratos se almacenan en él en forma de glucógeno o azúcar dispuesto para producir energía. Las proteínas sobrantes se transforman en urea, que se expulsa a través de la vejiga, y las grasas pueden usarse mejor como elementos energéticos. Almacena, pues, azúcares, grasas, vitaminas, cobre y hierro, y produce vitaminas solubles en la grasa, ayudando también a mantener el equilibrio hormonal del cuerpo. El hígado expulsa muchos productos de desecho, mediante la colaboración de la vesícula biliar.
Las enfermedades que desequilibran las funciones hepáticas -las más conocidas la cirrosis o destrucción de los tejidos hepáticos, subproducto del alcoholismo, y la hepatitis, infección producida por virus, alimentos en mal estado, contagios con personas u objetos infectados, etc.- son muy peligrosas y en ocasiones mortales.