Unas aseguran que la exclusión de uno de los principios inmediatos -proteína o ladrillos del cuerpo humano, carbohidratos o energía a corto plazo, grasa o energía acumulada para casos de emergencia alimenticia- y el uso -o abuso- de los otros dos es lo que hace expulsar al cuerpo los kilos que le sobran; otras afirman que la causa de la obesidad consiste en tomar en la misma comida alimentos aparentemente incompatibles. Se dicen cosas tan peregrinas como que la cantidad de calorías no es importante que es posible perder un kilo diario durante treinta días seguidos.
