Es un hecho que la rutina dividida de cuatro días permite grandes logros en lo que a adquirir fuerza y tamaño muscular se refiere, ya que permite entrenar fuertemente los diferentes grupos, dándolos a la vez el descanso suficiente para que puedan recuperarse y crecer. Aunque es posible hacer todo tipo de combinaciones entre grupos y días de entrenamiento, lo clásico es entrenar los lunes y martes, descansando el mercales y volviendo al gimnasio jueves y viernes para reposar nuevamente todo el fin de semana, es decir, al sábado y el domingo.
